Cuando hablamos de cannabis, la mayoría imagina el fenómeno reciente: dispensarios, cultura pop, “strains hype” y marketing verde. Sin embargo la historia profunda del cannabis tiene autoría femenina. Mujeres fueron quienes cultivaron, seleccionaron, dosificaron y aplicaron cannabis como herramienta clínica, ritual, obstétrica y anti dolor durante miles de años.
Biológicamente tiene sentido:
las flores ricas en cannabinoides nacen en la planta hembra.
Esa doble raíz —histórica + biológica— cambia el modo en que interpretamos el cannabis hoy.
Cannabis femenino: raíces históricas y evidencia antropológica
Registros arqueológicos y textos antiguos muestran cannabis medicinal usado en China pre-Han, India védica, Medio Oriente, Mesoamérica y Norte de África.
En prácticamente todas estas culturas el manejo de plantas era oficio femenino comunitario.
Y el cannabis acompañó el cuerpo femenino en:
- dolor pélvico
- inflamación
- ansiedad
- ciclo menstrual
- parto y recuperación post parto
Era medicina funcional, no recreativa.
Las mujeres seleccionaban fenotipos que funcionaban mejor para su comunidad —lo que hoy llamaríamos “fitomejoramiento” empírico, siglos antes de existir el concepto científico formal.
La prohibición borró también una epistemología femenina
A partir de 1930s, con la prohibición global liderada por EEUU, el cannabis pasa de medicina tradicional → a amenaza cultural.
Y ese proceso coincide con la expulsión del conocimiento femenino en ginecología comunitaria, partería y herbolaria.
La narrativa moderna del cannabis nace ya intervenida, sesgada y con la memoria femenina cortada.
La ciencia moderna está confirmando el fundamento fisiológico
Con el descubrimiento del Sistema Endocannabinoide (SEC) en los años 90, la investigación abre un campo riguroso para entender por qué funcionaba.
Hoy sabemos que los cannabinoides modulan dolor, inflamación, inmunidad y tono emocional.
La investigación actual en salud femenina avanza especialmente en:
- endometriosis
- dolor pélvico crónico
- inflamación asociada a ciclo
- ansiedad regulada por SEC
No es misticismo arbitrario: había principio biofisiológico real.
El futuro cannábico debe recuperar memoria
La industria cannábica moderna está naciendo por segunda vez.
La primera fue ancestral y femenina.
La segunda es biomedical + industrial + científica.
Si la segunda ignora la primera, repetimos el mismo borrado.
Reconocer la historia del cannabis femenino no es nostalgia romántica.
Es precisión histórica + ética + rigor.
El cannabis no vuelve para ser moda.
Vuelve con evidencia, con biología y con memoria restaurada.
